Habitualmente, una de las preguntas más frecuentes que le hacen a un diseñador de modas es: ¿Cuál es el color de moda? Y yo quisiera responder siempre: Pregúntenme cómo elegir los colores que mejor nos quedan. Porque una cosa es que los colores estén de moda y otra muy diferente que los colores de moda te sienten a ti.
De un modo general diremos que los colores tienen temperatura, estos pueden ser fríos y cálidos. Los primeros tendrán siempre en su composición un determinado porcentaje de azul, suelen asociarse con el agua, al hielo, la luz de la luna; van del amarillo-verdoso al violeta pasando por el azul, dan la impresión de contraerse.
Los colores cálidos son la gama de colores comprendida entre el amarillo y el rojo-violeta (rojos, amarillos y anaranjados), los asociamos a la luz solar, al fuego... de ahí su calificación de "calientes", se los conoce como colores activos, parecieran expandirse.
Elegiremos la temperatura del color que nos queda de acuerdo a la tonalidad de nuestra piel. Ubícate bajo la luz natural, si miras la palma de tus manos y tus muñecas y las venas se ven azuladas, entonces tus colores son los fríos: azules, blancos, magentas, celestes, turquesas. Si los metalizados son tus favoritos, elige los plateados.
Ahora, si al mirar tus palmas y las muñecas tus venas tienen tonalidades verdosas, entonces elige los colores cálidos: naranjas, rojos, amarillos, beige, champan, tostados, metálicos dorados.
¿Un secreto al margen de toda teoría? Frente a un espejo bien iluminado aproxima a tu rostro la prenda o la tela que deseas comprar, si te ves iluminada, más bonita; entonces cómprala; de otro modo, sigue probando con otros colores. El espejo te dará la mejor respuesta.
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