Cómo elegir un zapato adecuado

El pie de un niño pasa por muchos cambios según las fases de su desarrollo. El objetivo principal de un zapato consiste en brindar una protección a los pies y precaver diversos daños. Asimismo, debe sostener el tobillo del pequeño para favorecer su equilibrio y optimizar su crecimiento. Es importante destacar que cuando no se usan zapatos, los pies pueden volverse planos.

Los zapatos consisten en un gasto económico para los padres, el cual es necesario. El precio depende de su material. Toma en cuenta que el cuero es lo más oneroso. Sin embargo, evita la acumulación de sudor y la irritación del pie. En cuanto a las suelas, son también esenciales. Puedes optar por las de goma o las de cuero. No olvides que no debes fijarte tanto en el aspecto del calzado, sino que es primordial privilegiar la comodidad y el sostén del pie.

DISTINTOS CONSEJOS SEGÚN LAS EDADES

De 0 a 18 meses

Antes de los 6 meses de edad, el niño no camina. De esta manera, debes elegir un zapato cómodo que lo proteja del frío. A partir de los 8 meses, es recomendado calzarlo con un modelo blando y alto, el cual tiene que sostener su tobillo. Es primordial que el interior del mismo sea de cuero para dejar que su epidermis respire. Asimismo, la suela exterior debe ser antideslizante para prevenir las caídas. Finalmente, se aconseja que la parte anterior del zapato esté acolchada. Esto permite proteger los dedos de los golpes.

18 meses a 4 años

En este periodo, el pequeño ha aprendido a caminar y no para de moverse para conocer su entorno. Por esta razón, es necesario elegir zapatos que sostienen su tobillo. Asimismo, deben ser ligeros para no perturbarlo en sus movimientos. También se sugiere añadir suelas amovibles para brindar comodidad a tu hijo. Debes tener cuidado que las costuras interiores no le provoquen heridas. Finalmente, no olvides fijarte en el crecimiento de su pie y comprar frecuentemente nuevos modelos adaptados.

De 4 a 7 años

A esta edad, el niño empieza a ir a la escuela y durante los recreos, suele correr con sus compañeros. Por lo tanto, los zapatos tienen que ser resistentes y cómodos para prevenir la aparición de ampollas o heridas diversas. Lo ideal consiste en alternar dos pares de calzados, unos altos y otros bajos. En ambos modelos, debes colocar una suela de cuero para permitir la evacuación de la transpiración. Evita los zapatos en materiales sintéticos, ya que favorecen la maceración de los pies y el desarrollo de hongos.

A partir de los 7 años

Generalmente, los infantes empiezan a cuidar su apariencia a esta edad. Por eso, los padres deben optar por un calzado de buen aspecto, pero sobre todo de calidad. Se sugiere que vayas a comprar el calzado de tu hijo con él para que pueda elegir un modelo que le guste, pero que esté adaptado a sus necesidades. No adquieras materiales sintéticos e intenta orientarle por un zapato resistente y que tenga el interior de cuero. A veces, es necesario ir a varias tiendas para encontrar el modelo perfecto.

Detalles a tomar en cuenta

Cordones

Los zapatos con cordones son la mejor opción para los niños, aunque atarlos suele ser un aprendizaje complicado para los pequeños. Estos modelos brindan una buena posición al pie, la cual no se modifica en el transcurso del día.

Velcro

Muchos padres optan por comprar calzados con velcro, ya que su uso es más sencillo. Sin embargo, estos zapatos se gastan más rápidamente y no brindan un sostén suficiente al pie. Por lo tanto, el niño suele desequilibrarse, principalmente cuando aprende a caminar y puede sufrir de esguinces.

Botas

Puedes comprar unas botas a tu hija, pero no antes de los 4 años de edad. Asimismo, debes asegurarte que el modelo le sostenga su tobillo. En la mayoría de los casos, se aconseja privilegiar los modelos con cordones para poder regular el sostén del pie y de la pierna.