Implementan primera escuela de modelaje para “cholas”

Tras una década de ardua labor para posesionar el desfile de la “Chola paceña, tradición nuestra”, Rosario Aguilar, junto a algunas modelos, implementaron este fin de semana la “Escuela de Modelaje Promociones Rosario”, que formará a interesadas en modelar con la ropa de la mujer típica de la región.

“Inauguramos la ‘Escuela de Modelaje Promociones Rosario’ con 15 nuevas cholitas que pasarán cursos por tres meses y se les enseñará desde el protocolo, la cultura de la mujer paceña y el liderazgo para que ellas den a conocer la identidad y la cultura de la chola”, dijo su fundadora Rosario Aguilar.

El objetivo de la Escuela de Modelaje es para que las modelos presenten a la típica mujer paceña en pasarelas del interior del país y el exterior, además de la revalorización del liderazgo de la chola paceña en espacios de decisión política y actividades culturales, sociales y económicas.

“La mujer de pollera tiene la misma capacidad de ocupar cargos e incluso representar al país y traer logros y títulos. Al inicio (de la presentación en pasarelas) había desconfianza de la sociedad, pero pusimos el esfuerzo y trabajamos ad honorem y ahora ya se reconoce a la chola paceña”, argumentó Tania Chambilla, presidenta de la Escuela.

A fuerza de voluntad y en parte con el respaldo de Cinetel, las primeras modelos de pollera y manta, dirigida por Aguilar, esculpieron la idiosincrasia de los paceños y paceñas que discriminaban a la mujer de pollera, pero actualmente reconocen el valor, la gallardía y la fortaleza de la mujer de pollera.

“La mujer de pollera es poco reservada y no es de exponerse fácilmente, entonces (en la pasarela) debía ser elegante y cuidadosa para que no se ridiculice sino mostrarse tal cual es la chola paceña desde su gallardía, elegancia y su propia identidad”, argumentó Chambilla.

Las primeras cursantes de la Escuela de Modelaje, durante el acto de inauguración, manifestaron el interés de aprender el modelaje de la chola paceña, pero también exteriorizaron el nerviosismo de presentarse en público exhibiendo el atuendo de la mujer típica de La Paz.