¿Conocías los trucos para devolver el blanco a tu ropa?

odos conocemos el truco de la lejía para intentar que nuestras prendas recobren su blanco inicial, pero existen otros remedios menos agresivos para nuestras prendas con los que podemos conseguir incluso mejores resultados. Coge papel y bolígrafo y apunta.

1. Bicarbonato de sodio.

Podemos añadirlo al detergente, tanto en un balde como en el cajetín del nuestra lavadora con el fin de ser usado durante el prelavado. Basta con media taza para obtener resultados sorprendentes y conseguir mitigar el amarilleamiento de nuestra ropa.

2. Perborato.

Este compuesto potencia su efecto blanqueador a una temperatura igual o superior a los 60ºc. Para usarlo en la lavadora basta con añadir 3 cucharas junto con el detergente y elegir un programa que alcance los grados idóneos para cumplir su función blanqueante.

3. Zumo de limón.

Este truco podemos hacerlo fácilmente en casa. Llenamos un cubo de agua, incorporamos un poco de detergente, añadimos el zumo de 2 limones y una cucharita de sal. Una vez hecha la disolución, frotamos la prenda y la dejamos en remojo durante una media hora. Tras ello, podemos proceder a lavar la prenda en la lavadora, en un programa especial para ropa blanca.

4. Agua oxigenada.

En este caso debemos primero lavar la ropa y luego incorporar el agua oxigenada en el momento del aclarado. Con un vaso de agua oxigenada por cada litro tenemos más que suficiente. Además, si tras ello tendemos las prendas al sol conseguiremos un mejor resultado.

5. Leche fría.

Este es sin duda el remedio de la abuela por excelencia... ¡y funciona! Sumerge tus prendas en leche fría durante varios minutos, déjalas reposar y luego lávalas con tu detergente habitual. Ya verás cómo notas la diferencia.

De todas formas, si separas la ropa de color de la ropa blanca y utilizas bien tu lavadora no tendrás por qué acudir a ninguno de los remedios anteriores. Lo mejor es que uses detergente en polvo y escojas el programa más adecuado según el tipo de tejido de tus prendas. Así conseguirás unos blancos impolutos.