Cuando la ropa no te deja ser niño

No tenía más de cuatro años y su pequeño cuerpo estaba entallado por unas ajustadas calzas imitación cuero que acompañaba con graciosos botines de tacón y una polera corta que no cubría el ombligo.

El padre de la pequeña se mostraba encantado por la modernidad de la niña que llevaba el cabello largo y bien planchado con una capa excesiva de brillo labial en la diminuta boca. Su apariencia llamó mi atención, sus grandes ojos me transportaron a la época de mi niñez y recordé que aunque a esa edad me encantaba jugar a ser grande como a cualquier niña, usar la ropa de mamá (tacones altos incluidos sobre los que me tambaleaba) y pintarrajear un poco el rostro; era solo parte de un juego, después de un par de horas volvería a mi inocente y hermoso mundo de juguetes, cara lavada y diversión por montones.

Al parecer, durante los últimos años predomina una corriente entre los padres y muchos diseñadores de ropa infantil que olvidan que un niño debe jugar, saltar, estar cómodo sin presiones en un cuerpo que se desarrolla día a día y el look descrito al principio de este artículo es solo una tendencia para imitar al mundo de los mayores.

Los niños, (especialmente las nenas) son grandes consumidores de una moda adulta ciertamente perjudicial tanto para el cuerpo como para la mente infantil en formación. Recordemos que las infecciones e inflamaciones a nivel genital que puede llegar a provocar el uso continuo de pantalones muy ajustados es una advertencia de serios estudios de medicina que recomiendan incluso a los adultos llevarlos solo eventualmente y escoger de preferencia pantalones de tela más sueltos.

Respecto al uso de cosméticos, brillos labiales y sombras, sabemos que el paso del tiempo es inexorable y con la adolescencia y juventud, estos elementos serán parte inevitable de la apariencia de nuestras jovencitas, una forma de manifestar su personalidad y femineidad, entonces… ¿ Por qué anticiparse?

Tal vez debemos retomar los atuendos divertidos y sueltos que proporcionan libertad de movimiento y comodidad, los materiales elastizados combinados con fibras naturales como el algodón, hilo o incluso lanas con fibras delgadas para los climas fríos. Los sueños de cuentos infantiles y princesas pueden ser divertidas opciones para los momentos lúdicos o de gran gala, una fantasía que la niñ@ recordará el resto de su vida.

La niñez es una etapa breve, única y maravillosa, disfrutémosla confortable y saludablemente junto a nuestros queridos niños permitiéndoles vivir a plenitud sus primeros años de existencia.