"Es mi mejor año como modelo, en lo personal, en general, es mi mejor año, estoy contenta, estoy agradecida porque las oportunidades que se me han dado, a nivel económico me está yendo muy bien, muy bien", dijo Herela en entrevista con el programa televisivo No Mentirás, al que asistió acompañada de su madre, María René Limpias, quien le dio todo el apoyo en medio de una ola de críticas que está recibiendo por la publicidad de Corimexo.
En criterio de Herela, el país está dividido entre quienes la apoyan y quienes la critican. Y, según dijo, los que están en contra no saben distinguir entre lo sensual y lo vulgar.
"La gente creo que no sabe mucho la diferencia entre lo que es ser muy sensual y vulgar. (La publicidad de Corimexo) no es vulgar. Cuido que mis trabajos no caigan en la vulgaridad", señaló la modelo, que vivió sus 26 años entre Bolivia y Estados Unidos.
Reconoció que las críticas, en un primer momento, la "conmocionaron", pero se declaró feliz porque ya varias empresas le hablaron para hacer trabajos con su imagen y porque la publicidad de Corimexo "sobrepasó toda la expectativa que nosotros teníamos".
En los últimos días se desató una ola de críticas por el uso del cuerpo femenino como objeto para vender muebles. Incluso, activistas feministas plantearon una demanda penal contra el gerente de Corimexo y presentaron denuncias contra un medio de comunicación por haber publicado la noticia sobre "la chica Corimexo".
Herela explicó que cuando ella aún era una niña vio una publicidad de Corimexo, que usualmente recurre a los desnudos para ofrecer sus muebles, y que entonces se propuso que era su objetivo.
Primero, según contó, hizo una publicidad de motos de la que pocos se enteraron, luego filmó una película y fue ella quien le propuso al publicita Miguel Chávez, ser la imagen de Corimexo.
"Sabía a lo que me metía, la intención era causar un impacto, que la gente hable del tema", señaló. Incluso, contó que antes hizo otros spots para la misma marca de muebles, pero que no tuvieron ningún impacto porque ella estaba vestida.
Dijo respetar las críticas de quienes consideran que se trata de una cosificación de la mujer, pero también pidió respeto para su decisión, sin embargo, en su opinión, existe "doble moral" porque cuando opinan se indignan por el video, pero luego vuelven a verlo. Por eso, dijo, el video promocional de cuatro minutos que ella colgó en sus redes sociales ya tiene más de 60 mil vistas. Indicó que la publicidad aún no sale en la televisión.
En su criterio, en otros países también se hacen desnudos, pero no provocan rechazo como en Bolivia. Ella dice que no ve nada de malo en su trabajo y le atribuye al hecho de que tiene mentalidad abierta por haber vivido en Nevada, EEUU, donde radica su padre.
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